martes, abril 3

Calentando...

Empecé a besuquearte el cuello. Facilitaste la faena inclinando tu cabeza hacia el lado opuesto y cerrando los ojos. Mis labios apenas te rozaban pero los sentías como si fueran cuchilos de sierra. Luego entró mi lengua en juego siguiendo el camino que le marcaba tu yugular.

Sin dejar de lamer, puse mis dedos en tu barbilla y me fui encarando hacia la tuya.

Subi.

Un poco más.

Te mire a los ojos. Nuestras pestañas casi se rozaban.

Mis labios sobre los tuyos.

Oscuridad.

La punta de una lengua explorando unos labios ajenos.

Respondiste con la tuya.

Siento un contacto en la punta.

Ambas se retiran súbitamente sorprendidas por el eléctrico contacto. Esto dura lo mismo que un parpadeo. Enseguida vuelven a lanzarse en busca de la otra. Saltan. Bailan y se agarran.

Mi mano en tu nuca intensifica el beso apretando hacia mi.

Nuestras salivas lubrican el baile de forma contínua haciéndolo más jugoso y lúbrico.
Una mano cae en tu muslo y lo aprieta. Va subiendo.

Nos tomamos un descanso para respirar.

Nos miramos y volvemos a morrearnos. Mi lengua se cuela por completo en tu boca y juega con el paladar y la parte interna de tus labios. La mano ya está por tu vientre buscando cobijo en tu camiseta y lo encuentra, pero no tiene suficiente. Sigue subiendo.

Tus pechos, piedras preciosas que me iluminan el camino a mi mano, acogen las atenciones con júbilo.

Beso tus mejillas y cuello. Te raspo con mi incipiente barba pero te encanta. Mis dedos ya juegan con tus pezones valorando lo preparada que estas. Como si de un ciego leyendo braile se tratase, Sé que no sólo estas preparada: estas mucho mas excitada de lo que pensaba.

Sin perder el tiempo, levanto tu camiseta hasta sacarla por encima de los brazos.
Tus pezones ven la estancia por primera vez bajo el tamiz de la transparente tela de color negro. Aún les gusta más cuando la ven directamente y se ponen como locos cuando les cuento secretos con mi lengua.

Primero al izquierdo y luego al envidioso derecho. Mi mano ayuda colándose dentro de la copa y liberando a el pecho correspondiente con un ligero empujón hacia arriba.
Me tomo un respiro para dar un trago. Con los cubitos apelotonados en mis labios, te beso profundamente mientras un escalofrio nos inunda.

Captado el mensaje, tomas asiento sobre mis muslos, mirándome. Tus manos en mis hombros y vas bajando. Me deleito mirando tu cuerpo pasar ante sus ojos: tu entrepierna marcada en los ajustados pantalones, tus pezones asomados al balcón del sujetador. Eso sí que me lo permites lamer..... Mientras te meriendo yo acomodas tu culo sobre mi paquete pero sin dejarte caer. Me rodeas con tus brazos y sientes el vello de mi pecho en tu barriga.

Aflojas tus rodillas y me sientes entre tus piernas. Una parte dura e mi se aloja perfectamente en tu entrepierna y te restriegas sobre ella con lentos vaivenes de cadera.

De nuevo nos besamos.

Mis manos te abrazan la espalda hasta llegar al cierre del sujetador., notas un alivio en tu pecho al aflojarse el sostén.

Mis manos te recorren la espalda desnuda con fuerza mientras te retuerces sacando los brazos y liberándote del sujetador, que queda aplastado entre nosotros.

Te separas lo justo sin abandonar mi boca y sientes caer la prenda sobre tu regazo. La cojo y la lanzo hacia un lado.

Mis manos te sustentan las tetas por debajo y las levantan. Me incrusto entre ellas con mi juguetona lengua. Te agarras a mi cabeza mientras me las como enteras, una y otra vez, mientras te las olisqueo y las muerdo. Lo hago con cuidado, con la presión justa, haciéndote desear que lo haga con más fuerza, que me los trague... Un suspiro incontenible y un beso en mi frente es todo lo que puedes hacer.

-"Pues eso no es lo más delicioso que tengo"- me contestas sin pensar.

5 comentarios:

ALMA dijo...

Y repito, con esas historias y uno solita, que hacer??? chuparse el dedo sin duda y mirar y leer e imaginar.... a que buen post hombre. saludos suertudotes

Eva dijo...

Lo quq no deja de sorprenderme es que cuando a veces creo que te tengo más lejos, que vas alejando, de repente me sales con cosas como estas y tiras de mí... parece que lo sabes.

Gracias por esto (no sabes la falta que me hacía) y por todo lo demás.

Un beso. con los ojos cerrados.

Mari Carmen dijo...

Madre mía como está el patio!! Hacía un montón q no me pasaba, y mira lo q me encuentro!! Q calor me ha entrado!! jajajaja
Besotes

Scarlett dijo...

Mmmm....y delicioso leerte...ufs ufs...

mithras dijo...

ALMA: Cada vez te queda menos para estar solita, una mujer como tu hay que saber aprovecharla y sacarle todo la esencia que lleva dentro.
Gracias por seguir ahi.
Besotes jugosos.

EVA: Y tu que eres la que me tienes que decir que me sientes lejos no dices nada... desde luego... menos mal que no meto la pata todos los dias, y todos los dias no pasa hora y veinte...
Aprovechare algun dia para escribirte post como estos.

Un beso, jugoso, con los ojos cerrados ,acariciendote la lengua, los labios y saboreandote.

AFRO: Si, cuanto tiempo, siento lo de tu blog, espero que pronto vuelvas que eres mi primera lectora no-anonima.
Besos madrileños.

SCARLETT: Y delicioso que tu lo leas.